FUTURO CON HISTORIA
Todo plan de acción, para ser viable y perdurable en el tiempo, debe estar animado a partir de un sólido contenido ético. Y a ese contenido se refiere, fundamentalmente, la conciencia del directivo del ACA en cuanto administrador de un patrimonio que no le es propio -salvo en los límites de su condición de socio- sino que pertenece a todos y a cada uno de los integrantes de la masa societaria.
En esa conciencia y esa convicción, en nuestra cabal certeza de que los hombres de nuestro movimiento “Renovación en la Tradición” sólo serán mandatarios y servidores de la masa societaria, nos comprometemos a cumplir enérgicamente con los puntos que más abajo se detallan, vinculados con la autoridad moral que debe irradiar toda conducción, y también con el extremo celo con que deben ser cuidados y administrados los bienes de nuestro Club, es decir, los de nuestros consocios.